¿Cuándo preocuparse por una tos persistente?
- St Andrew´s Team
- 15 abr
- 2 Min. de lectura
La tos es uno de los síntomas más comunes que todos hemos experimentado en algún momento. Puede aparecer por un simple resfriado, alergias o cambios de clima. Pero, ¿qué pasa cuando esa tos no desaparece después de unos días o semanas? ¿Cuándo es momento de prestarle más atención? Se estima que más del 10% de las personas en algún momento presentan una tos crónica.

¿Qué se considera una tos persistente?
Una tos persistente es aquella que dura más de 3 semanas. Si persiste más allá de 8 semanas, ya se considera crónica. En estos casos, es importante evaluar su intensidad, frecuencia y si viene acompañada de otros síntomas.
Posibles causas de una tos persistente:
Infecciones respiratorias prolongadasComo bronquitis o secuelas de una gripe mal cuidada.
Alergias o asmaLa tos puede ser un síntoma de reacción a polen, polvo, moho, o animales.
Reflujo gastroesofágico (ERGE)El ácido estomacal que regresa al esófago puede causar irritación y tos crónica.
TabaquismoFumar irrita las vías respiratorias y produce una "tos del fumador".
Uso de ciertos medicamentosComo los inhibidores de la ECA, usados para controlar la presión arterial.
Infecciones más gravesComo tuberculosis, neumonía o incluso cáncer de pulmón en casos poco frecuentes.
¿Cuándo consultar al médico?
Debes acudir con un especialista si:
La tos dura más de 3 semanas sin mejora.
Va acompañada de fiebre, pérdida de peso, dificultad para respirar, dolor en el pecho o expectoración con sangre.
Su intensidad aumenta o interfiere con tus actividades diarias o tu descanso.
Una evaluación médica puede incluir una revisión física, radiografía de tórax o pruebas de función pulmonar para detectar la causa exacta.
Consejos para aliviar una tos leve:
Mantente bien hidratado.
Usa humidificadores para evitar la sequedad del ambiente.
Evita el tabaco y ambientes contaminados.
Cuida tu alimentación y evita alimentos irritantes si tienes reflujo.
Consulta antes de automedicarte.
Una tos persistente puede ser una señal de que algo no anda bien en nuestro cuerpo. Aunque muchas veces es causada por infecciones leves o alergias, si se prolonga por más de tres semanas, empeora o viene acompañada de otros síntomas, es fundamental consultar con un médico. Detectar a tiempo la causa de la tos puede marcar la diferencia en el tratamiento y la salud a largo plazo. ¡Escucha a tu cuerpo y no dejes pasar las señales!
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